Pablo Buydid:
notas abiertas

Según diversas encuestas, el correo electrónico sigue siendo una de las formas preferidas y más baratas de promocionar sitios en internet y servicios publicados en páginas web.

El correo electrónico es un medio eficaz, práctico y rápido cuando se usa con ciertos criterios. Lamentablemente es posible abusar de sus propiedades, y realizar tanto campañas deshonestas, como generar correos masivos a grupos de personas que solo sentirán molestia.

¿Cómo podemos usar entonces el correo electrónico como herramienta de promoción de sitios?

Lo primero que tenemos que tener en cuenta es el modo por el cual conseguimos la dirección de correo electrónico de nuestros posibles clientes. ¿Usamos métodos claros y transparentes? ¿O pasamos por alto su derecho de seleccionar? Es conocido y comprendido el malestar que provoca en las personas recibir mensajes no solicitados, usando SPAM, lo cual solo provoca que dicha persona no visite nuestro sitio.

Puede parecer que la técnica tan difundida de enviar un mail promocional a miles de contactos puede lograr la atención de una gran cantidad de clientes. En realidad, dicha práctica puede hacernos perder tiempo, ya que provoca un tráfico enorme de recursos, mientras es muy posible que se genere el rechazo hacia nosotros.

Por esto es importante buscar otros métodos, como la de realizar invitaciones previas para que las personas puedan suscribirse libremente a nuestras listas de correo, y muy importante, que puedan darse de baja en cualquier momento, y en forma automática por sola voluntad del cliente.

Pero ¿Cómo podemos conseguir y filtrar las direcciones que realmente podemos usar para comenzar a invitar a nuestros potenciales clientes? Existen soluciones electrónicas para captar direcciones de correo electrónico por métodos transparentes (no espías). La empresa en la que trabajo tiene a disposición herramientas de este tipo. Se trata de formularios en los que se registran todas las comunicaciones con nuestros visitantes. Luego se filtran las direcciones y otros datos importantes para comenzar a realizar campañas más definidas.

Claro, para esto tengo que atraer la atención de los clientes. Lo puedo hacer de muchas maneras, pero una de ellas es la de dar la oportunidad a que las personas puedan acceder a un sistema de noticias gratuito (en lo posible), mediante suscribirse a dicho servicio. Otras técnicas implican la realización de promociones, ofertas especiales, etc. Todo esto nos generará una lista de contactos 100% conformada por personas que expresamente desean recibir información. Por otro lado, las campañas de listas de correo a través de miles de contactos, probablemente solo permitan captar pequeñísimos margener de captación.

¿Hemos sacado cuentas del costo de inversión de realizar campañas de promoción?
¿Cuanto tiempo nos toma (o le toma al servidor) enviar todos los mensajes solicitados, y cuantos de los destinatarios responde favorablemente?
Resulta siempre una sorpresa analizar este resultado... Aunque sean pocos nuestros contactos, si son expresamente registrados por voluntad del visitante, tendrá una efectividad porcentualmente mayor que en el caso contrario.

Lo importante de todo esto, y es lo que me gustaría remarcar, es que si mantenemos actitudes transparentes hacia nuestros posibles clientes, lograremos ganar su confianza, y esa es justamente la barrera que más cuesta zanjar en estos tiempos en internet. si por el contrario, abusamos de la confianza de los clientes, e invadimos su privacidad, difícilmente lograremos que recurran a nosotros para contar con nuestros servicios.